Los primeros romanos comĂan solo para alimentarse, conocĂan muy pocos alimentos. Los platos más comunes eran el Palmetum, papilla de mijo, o guisantes; el Puls, gachas de harina de trigo y otros cereales a la que en ocasiones añadĂan manteca; la Polenta, gachas realizadas con harina de cebada.