En el desarrollo de su poema ARENGA AL PERUANO, Mario Florián hace un repaso de la gloriosa historia nacional peruana, destaca que el hombre peruano logró dominar una naturaleza tan difícil y llena de contrastes, para finalmente amansar este bravo territorio, logrando levantar imperios sobre los abismos y precipicios de los Andes (directa reminiscencia no solo al Tahuantinsuyo de los Incas, sino a las culturas anteriores a éste, como Tiahuanaco y Wari, que de alguna forma pueden ser consideradas también sociedades aglutinantes o imperialistas). Asimismo, toma tres símbolos totémicos del hombre andino: el PUMA, el RAYO (ILAPA) y el CÓNDOR (KUNTUR) con el fin relevar el pasado, el presente y el futuro del hombre peruano. Igualmente, se refiere a la TIERRA (Pachamama), en la cual vivimos los peruanos, desde hace eternidades. En suma, este poema exhorta al hombre común peruano a sentirse orgulloso de su pasado, a saber que es dueño de esta patria -donde habita- desde hace miles de años, a demostrar sus posibilidades en el presente y a forjar un gran futuro nacional, digno de nuestra historia.