Respuesta :
Respuesta:
Ser sal de la tierra y luz del mundo significa darle sentido a nuestras vidas por medio de nuestras obras. Jesús nos indica: Ustedes son sal de la tierra y luz del mundo (Mt. 5, 13-16) para definir la identidad de sus seguidores. La sal permite dar un sentido consciente a nuestras acciones del día a día a través de la esperanza, el amor, la solidaridad. La luz permite manifestar el conocimiento y el camino a recorrer, con ello ayudamos a no caminar en la oscuridad sino que seguimos las enseñanzas de Jesús en nuestras vidas.
Explicación: