5. Escribo carac 2. Loo el siguiente texto Característ Enrique es E alto y ya 4to grado Am Como un sueño pasaron los tres meses de vacaciones en el campol Mi madre me llevó esta mañana a la escuela Baretti para inscribirme, Iba de mala gana porque aún recordaba el campo. Toda la calle llena de muchachos. Las dos librerías cercanas estaban llenas de padres y madres que compraban bolsones, libros y cuadernos. Delante de la escuela se agrupaba tanta gente, que el portero, auxiliado por guardias municipales, tuvo la necesidad de poner or- den. Próximo a la puerta, me tocaron el hombro. Era ml profesora del grado anterior, siempre alegre, con su crespo cabello rubio. Me dijo: -¿Conque, Enrique, nos separamos para siempre? Lo sabía bien, pero me dieron pena esas palabras. Entramos a empellones. Señoras, se- ñores, mujeres del pueblo, obreros, oficiales, abuelos, empleadas, todos con niños en una mano y con certificados de notas en la otra, llenaban los corredores y las escaleras, produ- ciendo un rumor que parecía la entrada de un teatro. Volví a ver con alegria aquel gran patio, con las puertas de las seis salas, por donde pasé durante tres años casi todos los días. Entre el gentlo, los profesores iban y venían. Mi ex maestra me saludo desde la puerta de su clase diciendo: - Enrique, vas este año al piso superior. Ni siqulera te veré pasarl -y me miró con tristeza. El director estaba rodeado por un grupo de madres molestas porque sus hijos no tenían vacancla. Me pareció que tenia la barba un poco más blanca que el año pasado. Encontre algunos muchachos más altos, más gordos, Abajo, donde cada uno ocupaba su lugar, vi a los más pequeños, que no querían entrar en la sala, defenderse como potrillos encabritados, pero a la fuerza les obligaban a entrar en la clase, y aun así, algunos se esca paban después de estar sentados en los bancos, Otros, al ver que sus padres se alejaban, romplan a llorar, y era preciso que ellos volvieran a consolarlos, en medio de la desesperación de la profesora. Mi hermanito quedó en el curso de la maestra Diana; yo, en el segundo piso, Alas 7:30 horas estábamos todos en clase. Cin- cuenta y cuatro en la mla y sólo quince o dieciséis oran antiguos compañeros. ¡Qué pequeña y triste me pareció la escuela al recordar los bosques y las mor kas donde pasé el verano! Hasta pensaba en mi maestra anterior, tan buena, tan risueña con nosotros que casi parecia una compañera más. Sentía no verla alll, con su cabeza rubia enmarañada. Nuestro primer profesor de ahora es alto, sin barba, con el cabello cano, y tiene una arru ga recta sobre la frente: su voz es ronca y nos mira fijo, uno después de otro, como si leyera dentro de nosotros. No rle. Yo decia para ml: "Este es el primer día". Nueve meses por delante. ¡Cuántos trabajos, cuántas pruebas semanales! Mi madre me dijo: - Animo, Enrique, estudiaremos juntos! Y volvi a casa contento. Con expectativas, curiosidades sobre el nuevo grado. Enriquem pasi patio the en el 6. Escribo la Sc
5 tt 5 gg5 que no se puede hacer nada en el mundo que se le ha dado a su hijo quelegustaasu madreya sufamiliaquele gustaa sushijosya sufamiliaya sufamiliayamigosysusfamiliaresenelquesushijosnosesientanfelicesporsus hijosysus hijosquenohayan hijosenelquenosehayanhechosuspropiasfamiliasquehayanpasadosus
Explicación:
Hijos y nietos que se encuentren en el país de origen y que no se puede hacer nada en el mundo que se le haya otorgado un nuevo concepto al gobierno nacional