1) Sonreír ¡Un cristiano siempre es alegre!
2) Dar las gracias siempre (aunque no "debas" hacerlo).
3) Saludar con alegría a esas personas que ves a diario.
4) Recordarle a los demás cuánto los amas.
5) Escuchar la historia del otro, sin prejuicios, con amor.